13 de septiembre de 2013

13/09/2013

Quiero que duelas más que nunca y que tu recuerdo me queme. Quiero sentir dolor y no para torturarme, sino para sentir que estoy viva. No se. Todo ha cambiado en tan poco tiempo que me he quedado sin maniobras para que la tormenta no caiga de lleno sobre mi. Y ha caído. Y estoy completamente empapada, pero tu ya no estás ahí para secarme; ni para quererme. Dime que entiendes que no duela, dime que es normal que no sienta nada... porque se que mi corazón se está quebrando lentamente pero parece que lo tenga anestesiado. Y es de locos. Y quiero que sepas que no la odio ni pienso que quizás no te merezca. Que no son celos y que dudo que siga queriéndote ya que no duele como debería doler, pero siempre pensé que merecías lo mejor y ahora tengo miedo de que lo hayas encontrado. Y ya van siete días intentando olvidarte, 168 horas intentando no pensar en ti, 10.080 minutos tratando de ignorar todo lo que haces y 604.800 segundos fallando en el intento. Pero podré con esto, supongo. Solo necesito tiempo. Tiempo de soledad y lágrimas, de melancolía, nostalgia y recuerdos. Días grises de lluvia, paraguas, mantita y sofá. Días de lluvia y nubes negras, eso es todo lo que necesito.
Fdo. Una niña perdida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario