18 de noviembre de 2018

Belle indifférence




 




«Ojalá ahora que ya no puedes verme,
sea cuando más guapa me imagines.
Ojalá me imagines.
Ojalá me busques en otras bocas;
que busques y busques y me encuentres en todas.
Ojalá te despiertes sobresaltado y acompañado
y que tristemente te des cuenta de que no soy yo,
que no volveré a ser yo,
que entiendas que no puedes encontrar a tu lado
a quien has empujado al olvido.»

- Sara Búho



Te echo de menos, y quiero dejar de hacerlo. Que la alternativa sea otra, me da igual cuál, pero que tú ya no. Quiero que te vayas de mi cabeza porque difuminas mis límites y empiezo a confundirlos con los tuyos y cuando me voy a dormir no se quien soy. Que te largues para dejar de esperar, para empezar a darte por perdido, para digerir todo este nudo enmarañado durante meses y soportar el ruido. Te tienes que ir porque esta ya no es tu casa, yo ya no soy tu hogar, y los cuadro ya hace tiempo que están torcidos y sin forma de enderezarlos. Que la casa ya está vacía y tus cosas en otro lugar. Te echo de menos ya, pero vete, porque no puedo seguir mirando el reloj y haciendo cuentas, porque no te quiero recordar. Desaparece de aquí porque saber que existes se me clava en el costado y no puedo respirar. Déjame llorarte, sangrarte, vomitarte. Déjame echarte de aquí, no opongas tanta resistencia porque me estoy ahogando. Y te echo de menos pero lárgate ya de una vez. No quiero hablarte más.

No quiero escribirte más porque cada palabra es un latido menos,

un día menos,

una semana más. 





No hay comentarios:

Publicar un comentario